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Miocarditis y vacunas COVID-19: Cómo los CDC pasaron por alto una señal de seguridad y ocultaron una advertencia

Por Zachary Stieber, Lia Onely

Las vacunas COVID-19 causan inflamación del corazón, reconocen ahora las autoridades estadounidenses. Pero tras ser advertidas a principios de 2021 de un "gran número" de casos entre personas sanas y jóvenes en Israel tras la vacunación con COVID-19, las autoridades no alertaron inmediatamente al público y tampoco detectaron una señal de seguridad que estaba presente en Estados Unidos, según ha descubierto una investigación de Epoch Times.

Incluso después de que se notificaran muertes por miocarditis -inflamación del corazón- y de que se señalara la miocarditis como probable efecto secundario de las vacunas, las autoridades estadounidenses siguieron recomendando la vacunación a prácticamente toda la población.

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Esto llevó a que millones de jóvenes recibieran la vacuna.

Aiden Ekanayake, de 14 años, fue uno de ellos. Recibió una dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech en mayo de 2021, y una segunda dosis en junio de 2021.
Dos días después de la segunda dosis, Aiden se despertó en mitad de la noche con un dolor comparable al que sintió cuando se rompió el ligamento cruzado anterior. Su madre, Emily, lo llevó rápidamente al hospital, donde pasó varios días recibiendo cuidados. Incluso después de recibir el alta, su ejercicio estuvo limitado durante más de cuatro meses.

Antes de esta experiencia, la Sra. Ekanayake confiaba en los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC). Ahora ya no.

"Los odio. Creo que son malvados", declaró Ekanayake a The Epoch Times.

Sin transparencia

El 28 de febrero de 2021, Israel advirtió a los CDC, la agencia de salud pública estadounidense, de un "gran número" de casos de miocarditis tras la vacunación con COVID-19 de Pfizer, según muestran documentos obtenidos por The Epoch Times.

Internamente, la advertencia fue calificada de "alta" importancia y desencadenó una revisión de los datos estadounidenses. La revisión encontró 27 casos notificados en Estados Unidos, según un memorando del gobierno estadounidense fechado el 9 de marzo de 2021. La tasa de incidencia era baja, pero "la falta de datos y los datos incompletos dificultan la evaluación de la causalidad", afirmaba el memorando. La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA), decía, "no ha hecho una determinación final con respecto a la causalidad".

Semanas más tarde, ni los CDC ni la FDA habían alertado al público sobre el problema, incluso después de la muerte de una mujer israelí de 22 años, previamente sana, y de las reuniones informativas de funcionarios israelíes e investigadores del Departamento de Defensa de EE.UU. (DOD).
Al igual que Israel, el DOD estaba registrando un número de casos de miocarditis superior al previsto. Los pacientes eran en su mayoría varones jóvenes y sanos.

En abril de 2021, los CDC se reunieron dos veces a puerta cerrada con funcionarios militares. Los funcionarios militares presentaron datos durante al menos una de las reuniones a los CDC. Esa presentación, que nunca se ha hecho pública, "incluía nuestros datos y análisis preliminares de los pacientes que nos sugerían que la miocarditis era de hecho un posible efecto secundario de las vacunas COVID-19 de ARN mensajero (en el ejército estadounidense)", dijo el Dr. Jay Montgomery, uno de los presentadores, a The Epoch Times por correo electrónico.

Las vacunas de Pfizer y Moderna utilizan ARN mensajero (ARNm).

El 27 de abril de 2021, tras las reuniones, la entonces directora del CDC, la Dra. Rochelle Walensky, habló por fin del asunto en público, durante una sesión informativa en la Casa Blanca.

La Dra. Walensky dijo que "no hemos visto ningún informe" de miocarditis después de la vacunación. Eso es falso, según los datos de los CDC: la agencia recibió 141 informes de miocarditis en el Sistema de Notificación de Reacciones Adversas a las Vacunas (VAERS) a finales de marzo de 2021. Otros 24 casos se registraron en el Vaccine Safety Datalink, un segundo sistema gestionado por los CDC.

Además, antes de la sesión informativa, la Dra. Walensky fue copiada en múltiples hilos de discusión sobre la miocarditis y una enfermedad relacionada, la pericarditis, incluyendo un hilo sobre los médicos en California que veían los casos, muestran los correos electrónicos internos obtenidos por The Epoch Times. Ella respondió a uno de los hilos, diciendo que la información era "súper útil".

"No hemos visto una señal [de seguridad]", el Dr. Walensky también dijo a los periodistas durante la sesión informativa, "y de hecho hemos buscado intencionadamente la señal en los más de 200 millones de dosis que hemos administrado."

Entero artículo AQUÍ: https://www.theepochtimes.com/article/myocarditis-and-covid-19-vaccines-how-the-cdc-missed-a-safety-signal-and-hid-a-warning-5300341?utm_source=newsnoe&src_src=newsnoe&utm_campaign=rtbreaking-2023-09-29-2&src_cmp=rtbreaking-2023-09-29-2&utm_medium=email&utm_content=wall-inactive&est=5q6MBkeKS3QS97hbwWd2ju8QtnhtwD3PhA6kQ42jZGroIKEnkdFEDkU5PQ%3D%3D

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